Experiencia y reflexión de un vocal de Mesa.

Ayer domingo 26 de octubre, fuí vocal (y presidente de mi mesa) de recepción de votos a los cargos del Municipio de Chiguayante.

Estuve cerca de 13 horas trabajando, es la tercera vez que me toca esta función,este deber, la tercera vez que me toca con otros tres vocales, con los cuales pasaron dos cosas:

Una, es que de varias formas, lo pasamos bien y nos hicimos amigos, las bromas y las risas eran a cada minuto, y nos mantenía compartiendo alimentos, relatos, y apoyo para atender a los votantes. El tiempo se me paso volando.

Dos, de la misma forma, quizá por la formación que teníamos, por una orientación personal, nos dedicamos a ser muy eficientes en la atención, esto era: Atender con la mínima cantidad de errores, con la mayor rapidez a los ciudadanos de nuestra mesa (paso sea dicho, a varios votantes eran nuestros propios ex compañeros de colegio, vecinos o amigos). Esto nos hizo ser una mesa que en su peor momento ayer, tubo a 4 personas en la fila.

Salimos a las 19:20, y esto ocurrió principalmente porque teníamos muy pocos errores en nuestra gestión.

¿Qué reflexionó de ayer?, y de este papel de ser Vocal en las elecciones en mi país, creo que de mi parte, primero he tenido una orientación a entender esta labor como un servicio a mi país, a la democracia, y era en definitiva lo que esperaba que sucediera en mi país a partir de 1988. Derivo de lo anterior es que mi esfuerzo se alimentaba de un enfoque de pasarlo bien y hacerlo bien.

Saber que atiendo a mi propia mesa, y que algunos de ellos me atenderán en próximas elecciones, y que varios de ellos me atendieron antes, con amabilidad, alegría y rapidez; me hace confirmar esta labor como un trabajo ciudadano.

Un trabajo que la da sentido a ser parte de la ciudadanía, de participar en la correcta elección de nuestras autoridades y sus programas.

Y no es trivial para mi, que en una anecdota de un elector, él nos aleone, para que nos juntemos y hagamos un sindicato, para que nos paguen mucho más que los$7.000.- de aporte para colación, y que cobremos esta 'pérdida de tiempo'; cara porque, según, era muy injusto. Mis compañeros vocales, sospecharon que podría ser una buena idea.

Pero a mi no me aleono, me hizo más bien pensar; ¿desde cuando se mercantilizo tanto nuestro país?, ¿por qué un señor de avanzada edad cree que es perder el tiempo ser vocal?, y espera además que alguien nos 'dicte' que hacer?. ¿cuan profunda es nuestra democracia?, ¿cuan de nosotros es, como el dieciocho, la teletón, o la bolocco?. Fue cómo reducir por un rato, largo para mi, esta función a un trabajo remunerado, ha hacer el ridiculo, a un sin sentido.

¿Fue un día malo ayer?, después de todo; he pérdido mi tiempo ayer, no estube con mi familia un domingo, me pagaran, $7.000.- pesos que me lo gaste hace más de 20 años y trabajé como chino.

No, al contrario quiero creer que contribuí, a que muchos no perdieran su tiempo, a que vengan mejores tiempos para todos, contribuí a que mi familia vivan en democracia por muchos años más, que colaboro para que se generen las condiciones para que muchos no ganemos $7.000.- por día, si no más, y quizá por eso lo hice contento y ahora escribo esto contento.