Omar Cid Maureira: 2008-07

20080727

Kire: Episodio I


Una diminuta esperanza se mecía en la fogata, y él la sostenía con la mirada. Cómo había llegado a ese rincón del bosque, frío y húmedo, era una historia que quería contarle a los niños de la aldea. Por lo pronto era lo que lo mantenía despierto para cuidar la lánguida fogata que le calentaba, solo la esperanza.

El frío de ese día de caminata por los paramos, lo había agotado, a tal extremo, que no sentía sus piernas, ni sus manos, eran muñones que se arrastraba en ese agujero, como dormidos acalambrados, aterrados y cercanos a la muerte.

Pero en sus ojos brillaba la diminuta llama, que lo hacía sonreír, que extraño, sonreír a punto de morir, sonreír le dijo su abuelo era la última señal antes de la muerte por una travesía sobre el hielo.

Más un si el hielo también venia del cielo, más aun si era de noche, más aún sin tener una presa consigo, para demostrar que merecía el valor que se le concedían a los cazadores, no tendría semejante honor, había fracasado.

Y esa noche la única flama de esperanza que iluminaba su sueño era sobrevivir ha esa noche de infierno blanco, levantarse, avanzar rumbo al suroeste, cruzar lo que debiera cruzar y llegar al regazo de su madre, a pedirle perdón.

20080722

La locura me rodea

Ahora no sé, no he sabido, y no sé si sabré. La soledad es femenina, mis desiertos tienen el color de su pelo, la profundidad del mar tomo la indiferencia de sus ojos. No sé si estoy loco, solo cuando estoy en el mundo la olvido, cuando recorro en automatico lo que tengo que hacer, lo que debo hace, creo que la olvido. Pero me quedo solo unos minutos, y la deseo; como que hace solo unos años-segundos me encontré por primera vez despierto y sin ella.

20080718

La mujer esencial


En la que creo mi naturaleza, te he buscado.
Tantos tiempo y no te olvido.
Apareces en casi todas las mujeres
como pistas de un calor primordial
en retazos que no se pueden fundir
Brillas en cada nombre, en cada voz, cada gesto
Como una diosa que hace guiños mágicos
Caminas en la noche y duermes en las nubes
Apareces en las sonrisas, en el silencio.
En una lejana caricia.
Me hablas y me haces reir.
Te hablo y te hago reir.
Y entiendes mis vinculaciones
Te sorprendes y me sorprendes con tu sorpresa
Y vuelves a sonreir.
Y vuelves a no estar.
Despierto en la ciudades desiertas, en la calles.
Despierto en los edificios, las catedrales y los parques
Y no me hablas en la tristeza de las luces invernales
En la alegria de la música lejana
No dejo de pensar en mi corazón de niño
corazón que no deja de soñar en ti.

20080706

Gracias a mi tristeza natural.


Gracias, echándome del nido, del calor natural, lo que se perdió, siento que también me abrías una posibilidad de entender mi ser en el mundo, escucho tu canto desde cerca, no me gritas, aunque lo hiciste, y sigues cantando.

El agradecimiento se conecta con la alegría, con la plenitud, con la abundancia, pero es un estado, es una posibilidad. Desde aca te doy las gracias, creyendo que volveré, es seguro.

Quiero volver, imaginariamente, por un momento a mi hogar, y no irme sin despedirme, sin agradecer, el estado de partida. El no tener, la recóndito rincón que solo me tenia a mi, la soledad, creo que sé que es una interpretación, y como explicación estuvo por años en mi mundo.

Mi vida paso en su conexión con lo que se perdía, me conecto con la nostalgia, y esa fue, y era una gran posibilidad, darme cuenta de lo que perdía, de no soltar lo que deseaba, esa era mi tristeza.

La noche es triste, un árbol que se agita en el viento, un no es triste, y un si es triste, un recuerdo, una omisión, una comida, un vaso, la cárcel, un nube, la flor cortada.

Buena parte de mi vida eche de menos, algo siempre me falto, la niñez, y la juventud en la una profunda insatisfacción, en una profunda resignación, mi deseo y los hechos. Y he buscado los puentes, y no he soltado, la tristeza me ha movido todo este tiempo. Por muchos años conectándome con lo que se perdió, y buscando en alguna parte de mi recuperarlo.

Si la tristeza se mueve, para el paradigma actual, para la alegría de los mall, para el hacer constante, para alegría ciega aparece como detenida, si, pero la tristeza te mueve, no aparece, no reacciona, no hace, no produce, no satisface inmediatamente, parece quieta. Pero la tristeza también es acción.

A donde va?, en donde se hunde, que hace?, que busca?, que hurguetea?, que esconce?, donde trabaja?, cual es su conversación?. Por que no es bienvenida?, por que no es permitida?, porque nuestro observador no la contiene?. Por que yo también ahora le quiero decir adiós?.

Porque esta en nuestro abanico de posibles acciones?, habrá un tiburón triste?, un gato, un caimán, un león, triste?. Por que esta en nuestras posibilidades?, hacia donde nos envía?.

Ha sido un espacio que he habitado por años, por décadas, me ha hecho disfrutar ciertas bellezas que en otros ojos no las hubiera visto, pero me tengo que ir, pero me quiero ir sin antes agradecer, su inmensidad, su infinita herida, su canto, su mueca, su lagrima sin sentido.